En la zona donde hoy se encuentra el Santuario de Guadalupe hace muchos años se le conocía como “La Loma del Muerto”, este nombre surgió luego de que encontraran una persona sin vida cuando aún este lugar se encontraba despoblado.
En ese entonces, cuando aun ni siquiera existía el santuario y nadie había poblado esta zona, este hombre muerto fue hallado pero nunca se supo si murió por causa natural, por accidente o por crimen, pero fue una gran noticia en la localidad.
Desde aquel suceso, la gente cuenta que por esa zona pasan sucesos inexplicables, algunos dicen que se aparece un muerto, que se escuchan ruidos extraños, e incluso que en ocasiones en las noches apesta a cadáver, por lo que para muchos en esa loma hay misterios inexplicables.
De acuerdo a lo que cuenta la gente, desde entonces aquella colonia antes rica y opulenta, se vino abajo. Muchos de los vecinos que ahí habitaban decían que en sus casas se oían voces, que se movían las cosas solas y por eso algunos terminaron por mudarse a otra parte.
Sea cierto esto o no, es notable como actualmente hay casonas medio abandonadas, y sigue siendo un misterio todo lo que la gente cuenta hasta la actualidad.